Cinco gobernadores en apuros: las carreras electorales en Illinois, Kansas, Colorado, Wisconsin y la Florida
Noviembre 01, 2014
Hasta 10 gobernadores podrían perder el poder en las elecciones del 4 de noviembre. Así lo explica aquí el equipo del politólogo Larry Sabato, que recuerda que esa cifra unida al adiós de la republicana Jan Brewer en Arizona podrían igualar el récord de relevos en la historia reciente, que data de los comicios de 1962. Carreras como New Hampshire, Michigan, Maryland, Rhode Island, Alaska o Massachusetts podrían cambiar de manos en la madrugada del miércoles. En este enlace podéis consultar las últimas predicciones de Nate Silver. Aquí me centraré en los cinco duelos que merece la pena seguir con más interés.
1. Illinois: El millonario contra el gobernador impopular.
Se podría decir que el demócrata Pat Quinn es un político afortunado. A sus 97 años su madre le acompaña en los actos de campaña y no ha seguido los pasos de sus dos predecesores, que acabaron en la cárcel por sendos escándalos de corrupción. Y sin embargo Quinn está sufriendo para ganar la carrera por la reelección contra el republicano Bruce Rauner: un rival millonario y sin experiencia que se ha gastado unos 26 millones de dólares de su bolsillo durante la campaña electoral.
El demócrata ha recibido la visita del presidente, de la primera dama, del vicepresidente y del matrimonio Clinton. Pero eso no le ha ayudado a abrir brecha durante una campaña que se ha centrado en sus errores como gestor, que se explican muy bien aquí y aquí. El resultado dependerá de la habilidad de los demócratas para movilizar a los afroamericanos de las barriadas del sur de Chicago. Uno de los pocos lugares donde Obama sigue siendo un político popular.
2. Kansas: un gobernador escorado a la derecha.
Es difícil encontrar un estado tan conservador como Kansas. Pero sus habitantes podrían elegir este martes un senador demócrata y desalojar al republicano Sam Brownback de la mansión del gobernador. Lo primero tiene que ver con la irrupción en la campaña de un candidato independiente. Lo segundo cabe atribuirlo a la acción de gobierno de Brownback, que se ha escorado en exceso a la derecha y ha suscitado cierto rechazo entre la población.
El gobernador restringió el derecho al aborto, mermó las ayudas a los desempleados y privatizó una parte de la Sanidad. Pero sobre todo ha dejado un formidable agujero en las arcas públicas cuyo origen es un programa de rebajas de impuestos cuyos detalles se explican aquí. El aspirante demócrata es Paul Davis, que hasta ahora ejercía como líder de la minoría en la Cámara de Representantes del estado y que ha recibido el respaldo de más de 100 republicanos moderados, que consideran que el gobernador se encuentra demasiado a la derecha y es indigno de líderes más centristas como el legendario Bob Dole.
3. Florida: la atracción de lo malo conocido.
Ni Charlie Crist ni Rick Scott suscitan entusiasmo entre los votantes de la Florida. Al primero le reprochan el oportunismo con que se ha enrolado en los demócratas después de abandonar a los republicanos durante su campaña al Senado de 2010. Al segundo le persiguen sus medidas contra el aborto, sus recortes del gasto público y la multa récord que impuso el Estado a una empresa sanitaria que presidió durante una década.
Los incidentes de los debates televisivos han empeorado aún más si cabe la imagen pública de ambos líderes y han potenciado la impresión de que la mayoría de los ciudadanos no votará por ellos sino para evitar que gane el candidato rival. El aspirante demócrata arrancó por detrás pero lidera por la mínima los últimos sondeos. Un extremo que ha llevado al gobernador en las últimas horas a desembolsar 12,8 millones de dólares de su bolsillo para sembrar de anuncios negativos los canales de televisión.
4. Colorado. En manos de los hispanos.
Los expertos auguraban que el demócrata John Hickenlooper vencería fácilmente la carrera por la reelección. Al fin y al cabo, ha gestionado con acierto los incendios y las inundaciones que han azotado el estado y el desempleo se ha reducido casi a la mitad desde noviembre de 2010. Y sin embargo el gobernador no termina de despegar en unos sondeos que lo colocan peligrosamente cerca del republicano Bob Beauprez, que prueba suerte esta vez después de ser derrotado por el demócrata Bill Ritter en los comicios de 2006. A Beauprez le gusta presentarse como el propietario de un rancho de bisontes que entró en política para ayudar a las pequeñas empresas. Pero durante cuatro años fue congresista y conoce bien los resortes del poder.
El ‘New Yorker’ retrató a Hickenlooper en este largo perfil que publicó en mayo de 2013 y el ‘New York Times’ explicó sus problemas en esta historia que publicó unas semanas antes de la cita electoral. Los más relevantes tienen que ver con su cambio de opinión en relación con la pena de muerte y el control de las armas de fuego, que lo han llevado a tomar decisiones con las que no está de acuerdo la mayoría de la población. Los hispanos podrían apuntalar su reelección en los comicios del martes. Sobre todo si se deciden a votar contra Beauprez por estas declaraciones polémicas sobre la inmigración.
5. Wisconsin: con un ojo puesto en 2016.
El republicano Scott Walker no deja indiferentes ni a sus aliados ni a sus adversarios. Llegó al poder con el respaldo de los activistas del Tea Party y se podría decir que no les defraudó. Al tomar posesión, aprobó varias medidas para reducir el poder de los líderes sindicales y rebajar las pensiones de los empleados públicos que propiciaron varias concentraciones multitudinarias y un movimiento que recogió firmas suficientes para obligarle a refrendar su mandato en una elección especial. El reportero William Finnegan cuenta aquí cómo venció Walker aquella batalla: con el dinero de los millonarios que financian a los republicanos más conservadoras pero también con un carisma en el que muchos ven un posible candidato presidencial.
El alcance de la carrera de Walker dependerá de su habilidad para sobrevivir a los comicios del martes. Su rival es la demócrata Mary Burke: una mujer sin apenas experiencia política que montó hace años una empresa de bicicletas y cuyo perfil se puede consultar aquí. Un triunfo convertiría a Walker en uno de los aspirantes republicanos más cotizados para 2016. Pero antes debe derrotar a Burke en una carrera muy difícil y superar los flecos de esta investigación criminal.