Durante el debate demócrata que se realiza en este momento en el Miami Dade College, en Miami, organizado por Univision y el Washington Post, y en el celebrado el domingo 6 de marzo, en la ciudad de Flint, Michigan, la candidata Hillary Clinton criticó a su rival Bernie Sanders por su presunta oposición al rescate de la industria automotriz estadounidense, en 2008 y 2009.
Clinton dijo que Sanders “estuvo en contra del rescate automotriz”, y añadió: “yo voté para salvar la industria automotriz, él votó en contra del dinero que terminó salvando la industria automotriz”. Más adelante, detalló que ella respaldó la petición al Congreso hecha por el entonces presidente electo Barack Obama y los senadores de Michigan, de que se aprobaran $350 mil millones, de donde salieron parte de los fondos para rescatar a las principales empresas de automóviles.
“Él (Sanders) estuvo en contra del rescate automotriz… Yo voté para salvar la industria automotriz. Él votó en contra del dinero que terminó salvando a la industria automotriz”
¿Se opuso Sanders al rescate?
En líneas generales, Sanders estuvo a favor de rescatar la industria automotriz. Prueba de ello es que, el 11 de diciembre de 2008, el senador de Vermont votó a favor de un proyecto de ley que habría otorgado $14 mil millones expresamente a las empresas General Motors y Chrysler.
Sanders dijo entonces a la radio pública de Vermont que si el Congreso no actuaba había riesgo de añadir millones de desempleados más a la afectada economía estadounidense. El proyecto de ley, sin embargo, no fue aprobado, al no recibir el número de votos necesarios en el Senado.
Además, días antes, el senador había firmado una carta al presidente electo Barack Obama, junto a otros 14 colegas, en la que se reconocen los extraordinarios retos que en esos días enfrentaba la industria automotriz estadounidense, y se indica que el Congreso estaba trabajando “para dar la asistencia apropiada para que la industria automotriz enfrente estos retos”.
¿De dónde surge la acusación de Clinton?
Las críticas de Clinton a Sanders surgen de otras dos votaciones que realizó el Senado entre octubre de 2008 y enero de 2009.
Dado que los fondos específicos para rescatar la industria automotriz no fueron aprobados en la mencionada votación de diciembre de 2008, los gobiernos de George W. Bush y Barack Obama se vieron obligados a utilizar para tal fin recursos aprobados en el llamado rescate a “Wall Street”, de un total de $700 mil millones.
Ese rescate fue aprobado inicialmente en octubre de 2008. Entonces, tanto Hillary Clinton como el entonces senador Barack Obama votaron a favor, mientras que Bernie Sanders votó en contra. En enero de 2009, a días de la juramentación de Obama como presidente, se presentó en el Senado un nuevo proyecto para desaprobar la mitad de los fondos del rescate a “Wall Street”. Clinton votó en contra de la desaprobación, y Sanders votó a favor.
Sanders siempre se ha opuesto a ayudar a Wall Street, eso le impidió votar a favor del rescate que terminó favoreciendo a las empresas automotrices. Incluso hoy, el senador propone crear un tributo al sistema financiero, llamado “impuesto de la especulación”, cuyo dinero se utilizaría para financiar la educación gratuita en las universidades.
Veredicto
No se encontraron pruebas de que Bernie Sanders estuviera en contra del rescate a la industria automotriz en 2008-2009, tal y como Clinton afirmó en el debate demócrata del domingo 6 de marzo en Flint, Michigan. Sanders votó a favor del único proyecto de ley que llegó al Senado pidiendo fondos específicamente para las empresas de automóviles y mostró su preocupación al respecto en al menos dos comunicaciones por esos días.
Es “casi mentira” la afirmación de Clinton, de que Sanders “votó en contra del dinero que terminó salvando a la industria automotriz”. Ciertamente, los recursos que se usaron para tal fin surgieron de una ley a la que Sanders se opuso, pero en la misma no se especificaba que los recursos irían a la industria automotriz, y la mayor parte de los $700 mil millones sirvieron para rescatar a la banca en Wall Street. La declaración de Clinton es engañosa en torno a las posturas de Sanders.